Empiezan los fríos y, con ellos, llegan las manzanas. Como siempre, hay que intentar aprovechar al máximo los frutos de temporada y ahora, las manzanas están perfectas.
Esta receta es todo un clásico de la repostería francesa y es muy fácil. Según cuentan, las hermanas Tatin, en su restaurante de las afueras de París, tenían un día de mucho trabajo y dejaron caramelizando unas manzanas con azúcar y mantequilla. Cuando se dieron cuenta de que el caramelo estaba apunto de quemarse, le echaron por encima una masa de hojaldre para tratar de salvar el plato y lo terminaron al horno (esta es la parte que no termino de entender muy bien, pero los genios son así...). Cuando voltearon la sartén, descubrieron un plato delicioso y a los clientes les encantó...
SÓLO HAY QUE TENER UNA PRECAUCIÓN: