La harissa es una pasta picante de origen marroquí que se hace con pimiento rojo seco picante, ajo, cilantro, alcarabea y sal. En este caso la dorada ha sido una escusa, porque esta pasta se puede poner con casi todo: pollo, cordero, conejo, cuscús, patatas... Multiples posibilidades para una pasta muy sencilla de hacer en casa.
- 2 doradas de ración desescamadas y sin tripas
- 250 gr de fideos
- Pasta harissa, hierbabuena, ajo seco, aceite, sal y un chorrito de zumo de limón.
PREPARACIÓN
Cuece la pasta con caldo de pollo (o agua con sal si no tienes) y resérvala.
En un cuenco, mezcla la pasta con el resto de los ingredientes menos el zumo de limón. Reserva la mezcla.
Practica unos cortes en las doradas. Esto permitirá que el pescado se haga antes y que la mezcla penetre mejor.
¡A pringarse las manos! Unta bien el pescado por fuera y por dentro. Asegúrate de introducir bien la mezcla en los cortes. En un buen trozo de papel de aluminio, pon un poco de pasta. Mete un poco de pasta en el interior del pescado.
Ahora, con cuidado, cierra por los laterales el pliego de papel de aluminio para hacer un paquete. Antes de cerrarlo, echa un chorrito de zumo de limón dentro para que haya humedad y el pescado se cueza bien.
Mete los paquetes al horno a 180º C de 25 a 30 minutos. La dorada quedará cocida al vapor y algo picante por la harissa, pero no demasiado. Para emplatar, puedes acompañar el pescado y la pasta con un picadillo de tomate, pepino y menta. ¡Qué aproveche! Bis-há!
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